Tras más de tres décadas de organizar, cada 15 de septiembre, su tradicional corrida de toros, este año la empresa de Provincia Juriquilla, a 3 meses y medio de esa significativa fecha, ha decidido suspender el festejo. Lo anterior, siendo consecuente con la cancelación del Grito de Independencia y las actividades conmemorativas correspondientes, a organizarse por el Gobierno del Estado.
“Juriquilla se suma a la opinión del gobernador”, aseguró en entrevista Juan Arturo “El Pollo” Torres Landa, empresario del coso; “primero es la salud de los queretanos. Nos tenemos que sumar al esfuerzo y al sacrificio de las autoridades, para evitar que la gente se vaya a contagiar”.
Este año sería la ocasión número 33 de la organización de la tradicional corrida, que recibía a miles de espectadores y que se complementaba con oferta de comida y la ceremonia posterior del Grito.
Sin embargo, el popular “Pollo” Torres Landa no descarta la posibilidad de organizar alguna corrida antes de que concluya el año, siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan y ofrezcan festejos taurinos la Plaza México, a partir de noviembre, o la Nuevo Progreso de Guadalajara, en octubre.
“Yo soy como los taurinos: no adelanto la suerte; voy a ver cómo viene la embestida”, aseguró. “Si tuviéramos la suerte de que se arreglaran las cosas, y que estas plazas abrieran sus puertas y empezaran a dar corridas, desde luego que Juriquilla se sumaría a dar festejos taurinos. Estoy a la espera de lo que vaya a suceder”.
Reconoció, desde luego, que la Fiesta de los Toros vive momentos de enorme dificultad y que el gran reto es hacer que los espectadores regresen a las corridas, porque, en su opinión, la empresa no podría salir con sus cuentas contando con sólo una cuarta parte del aforo de la plaza, para salvar la distancia ideal entre los espectadores. “Ya te imaginarás el costo y lo que va a ser, además de la incertidumbre de cómo va a reaccionar la gente. Porque este un espectáculo que no puede ser como el futbol, sólo en la televisión. ¿Quién va a dar las orejas si no hay gente? ¿Cómo se va a arrimar el torero sin gente?”
Y concluye citando a Morante de la Puebla: “La fiesta de los toros, sin gente, es un sacrilegio”.