La profesora Lizbeth Noguez Zúñiga, directora técnica profesional, tiene por sueño con CEFORDE Lobos ser una opción para los niños sanjuanenses dentro del futbol, hacer crecer los talentos deportivos, reforzar sus valores para alejarlos de las situaciones de riesgo.
“Que CEFORDE Lobos permee en muchos puntos de la ciudad y que sea con el Centro de Formación Deportiva, verdadero impacto para niños, niñas, jóvenes y adultos en el ámbito deportivo, pero también personal. Que todos los integrantes de CEFORDE se sientan en familia. Que de manera deportiva pueda hacer impacto, que CEFORDE Lobos sea parte de su historia personal”, expuso la directora del proyecto.
En entrevista, Noguez expuso que uno de sus principales sueños es aportar a una educación de calidad, contribuir de manera positiva en su formación académica y personal en niños y jóvenes mediante disciplinas deportivas en varias comunidades de San Juan del Río.
La especialista del deporte gusta ver el lado positivo de las cosas. En medio de la pandemia, Noguez considera que está situación mundial en cuestión de salud nos brindó un contexto diferente a lo acostumbrado y por ello ante lo desconocido no supimos cómo actuar en ciertos aspectos, sociales personales, laborales y mucho más económicos.
“Debemos recordar que tu persona es lo más importante: aprende a defender tu espacio personal y date los descansos que necesites para enfrentar con más fuerza tu día. Sé honesto con lo que necesitas o requieres en el momento, date congruencia, valídate”, compartió la D.T.
El orgullo sanjuanense señaló la importancia que es el conectar con uno mismo para aprender a identificar cómo estás, qué te hace enojar, qué te pone triste, qué te frustra etc.
Noguez es una apasionada por su labor, ama el futbol y compartir lo que ha aprendido a lo largo de su carrera como haber compartido formación con Andrea Rábago con Gustavo Landaverde Marco Antonio Valencia.
La D.T agradeció el apoyo enorme que ha recibido de amigos de la plantilla completa de profesores, entre doctores especializados en el deporte, metodólogos de INDEREQ, entre otros. “Todos en conjunto fueron impulsores para poder terminar la carrera”, explicó.
“El tener compañeros que incursionaron en el fútbol profesional daba todos los ánimos para seguir adelante y tener los mejores resultados académicos porque estar rodeada de personas que llevaban toda una vida dentro del fútbol es un ámbito que impulsa”, finalizó.
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