Eduardo Barrera Azpeitia, apasionado del beisbol ha sido pilar de la historia del Rey de los Deportes en San Juan del Río. Desde el diamante del Ángel Guerrero, evocó cientos de recuerdos que forjaron su historia en este deporte, aquellas tardes en las que hubo casa llena y fue protagonista de cardiacos rallys.

Jugando en la novena de San Juan del Río, construyó una rica historia de éxitos en San Juan del Río, llevándola a ser la número uno. Con cientos de experiencias ganadas, recuerda entre ellas, haber lanzado en el juego de la serie final con el que consiguió el título de campeones, junto a su compañero, Enrique Bernal, como pitcher fue campeón de los regionales.

Dijo que su generación se caracterizó por jugar mucho beisbol. “Con Guillermo Romero, la familia Luna. Sería una lista de leyendas, muy linda de recordar a todos, algunos de ellos en vida otros que se nos adelantaron en este viaje, a la primera base”, declaró el jugador, haciendo una metáfora a la vida.

Originario de Celaya Guanajuato, sanjuanense de corazón, Eduardo Barrera llevó al beisbol de San Juan del Río, ser un referente a nivel regional, heredando la pasión de este deporte a su familia, a sus hijos quienes ahora continúan con el legado.

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“Todo el deporte en general es hermoso, con la colaboración de todos que de corazón”, reflexionó el jugador, quien deseó suerte a las novenas y que existan espacios como el Ángel Guerrero.