Con 44 años y siete Super Bowls en su vitrina, Tom Brady se embarca el jueves en un nuevo capítulo de su batalla contra el tiempo cuando sus Tampa Bay Buccaneers inicien la defensa del título en la nueva temporada de la liga de football americano (NFL).
En febrero, el considerado mejor jugador de la NFL de todos los tiempos comandó a los 'Bucs' al segundo triunfo de su historia en el Super Bowl, destruyendo los pronósticos que auguraban para Brady un retiro dorado en Florida.
El 'quarterback', un animal competitivo, había cambiado por primera vez de uniforme tras dos gloriosas décadas en los New England Patriots bajo las órdenes de Bill Belichick.
Aunque enfrente tenía al mariscal de campo llamado a sucederle, Patrick Mahomes, 18 años más joven, Brady comandó a Tampa Bay en el Super Bowl a un triunfo inapelable por 31-9 en una temporada marcada por el impacto de la pandemia de covid-19.
En uno de los deportes más exigentes físicamente, en el que la carrera media de un jugador profesional es de apenas 3,3 años, Brady sigue siendo un prodigio de longevidad y de ambición que no descarta seguir jugando más allá de los 45 años.
Espacio para mejorar
Pese a protagonizar una de las mayores gestas del deporte estadounidense, el 'quarterback' ha dejado ya el Super Bowl en el espejo retrovisor y solo piensa en volver a ganar en su temporada 22 en la liga.
"Es solo un año más y una experiencia", dijo Brady el martes. "Tenemos la oportunidad de jugar como el equipo de 2021, como lo mejor que podamos y nuestros entrenadores nos han puesto en la mejor posición posible para tener éxito".
Brady contará con un elenco de apoyo familiar ya que los Buccaneers arrancan la campaña con los 22 titulares del Super Bowl al completo, la primera vez que un equipo campeón lo consigue desde los Oakland Raiders en 1977.
"Tenemos mucha continuidad, tenemos muchas cosas sobre las que construir, tenemos mucha más experiencia juntos", dijo Brady. "Eso es realmente todo lo que se puede pedir como jugadores. Me gustaría que saliéramos y nos aprovecháramos de eso".
"Con lo buenos que fuimos la temporada pasada, con lo bien que jugamos, con el mismo grupo de chicos, me encantaría ver lo buenos que podemos ser este año", recalcó. "Podemos mejorar en muchas áreas (...) Pero tenemos que salir y hacerlo".
Nueva generación
Por detrás de los Buccaneers en los pronósticos se sitúan de nuevo los Kansas City Chiefs, que tras su contundente derrota en el Super Bowl se movieron rápidamente para reforzar su línea ofensiva, incorporando a Joe Thuney y Kyle Long para dar mayor protección a Mahomes.
Con el arsenal del que disponen y el talento de su mariscal de campo, a pocos les sorprendería ver a los Chiefs de vuelta en la final por tercera temporada consecutiva.
Otra de las atracciones de la temporada será analizar y disfrutar de la flamante nueva hornada de 'quarterbacks' novatos que se incorporan a la liga, encabezada por el número uno del Draft, Trevor Lawrence, que intentará reflotar a los Jacksonville Jaguars.
Zach Wilson, elegido con el número dos, estará a cargo de la transformación de los modestos New York Jets en una fuerza competitiva.
Por su parte, los Patriots y el incombustible Belichick confían en haber encontrado a un sustituto a largo plazo de Brady en el novato Mac Jones, al que han otorgado todos los galones después de cortar por sorpresa a Cam Newton.
Los estadios de la NFL de todo Estados Unidos volverán a acoger a multitudes después de que la pandemia provocara que una parte de la temporada 2020 se jugara en estadios vacíos.
Los nuevos protocolos contra el coronavirus tratarán de estimular a los jugadores a vacunarse, ya que quienes se nieguen deberán someterse a normas más estrictas y a pruebas más frecuentes que el resto de sus compañeros.