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Hace dos meses, el violinista y director titular de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ), Ludwig Carrasco, hacía un recuento de su quehacer artístico tras cumplir un año en este puesto, poniendo especial énfasis en las carencias y la falta de presupuesto para el desarrollo de los diferentes proyectos.
“Aquí en México, el director tiene que tener muchos campos de acción, y la gestión cultural es uno de ellos. Muchas veces es más el tiempo que se dedica a esta labor que al estudio, por desgracia; pero hay siempre proyectos que queremos hacer o asuntos que hay que resolver, o buscar soluciones o fórmulas para poder llevarlo a cabo. Idealmente no tendría que ser así, deberían haber dos identidades trabajando conjuntamente, pero debido a la realidad socioeconómica del país, es imposible hacerlo”, lamentaba en la misma entrevista, afirmando que aunque la OFEQ recibe del Gobierno del Estado cerca de 25 millones, hace falta un monto de seis millones más para resolver todas las necesidades de la asociación.
Tras compartir estos testimonios, hace unos días el director entregó una carta al Consejo Directivo de la OFEQ, para dar a conocer su renuncia, así como las razones que lo hicieron tomar esa decisión, relacionadas con las condiciones laborales y económicas de la orquesta, las cuales afectan en gran manera el resultado artístico de la Filarmónica de Querétaro.
Entre los diferentes problemas señalados, recalcó el impago de deudas a varios artistas invitados, el congelamiento de vacantes, así como “el incumplimiento del contrato de trabajo que tiene suscrito la OFEQ con mi persona al tener ya un adeudo de pago de dos meses (julio y agosto), y al no haberse renovado el seguro de gastos médicos mayores que caducó el mes pasado”.
Además mencionó la necesidad de generar opciones de transporte para facilitar el acceso al Teatro Metropolitano en los días de concierto, resolver la falta de una concha acústica, mejorar los salarios de los integrantes y conseguir recursos para la difusión de las actividades de la OFEQ. Ludwig Carrasco entregará la batuta este 31 de diciembre, al término de la tercera temporada de conciertos, para continuar ahora con sus labores como nuevo director de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes.
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Su paso por Querétaro
Desde su nombramiento como director titular de la OFEQ, Ludwig se abocó a impulsar en la entidad, a la nueva generación de músicos e instrumentistas, así como a recuperar y promover la música mexicana en las salas de conciertos, una de sus principales líneas de trabajo.
De esta manera, a lo largo de su primer año de trabajo, incluyó en el repertorio de la orquesta, temas de compositores mexicanos como Silvestre Revueltas, Francisco Gabilondo Soler, Pablo Moncayo, Guty Cárdenas, Blas Galindo, Melesio Morales, Manuel Esperón, Eugenio Toussaint, Julián Carrillo, Pepe Guízar, Consuelo Velázquez, Rubén Fuentes y Felipe Villanueva, quienes fueron interpretados por solistas invitados como Elena Durán, Carlos Gándara y Wissam Boustany, así como la soprano María Anaya y el flautista Carlos Enríquez, ganador del Primer Concurso Nacional de Solistas de Repertorio Mexicano, organizado por la OFEQ a mediados del año pasado.
Durante su estancia también fundó al colectivo Interciclos, una agrupación dedicado a la investigación y la creación de música contemporánea, que hace apenas una semana dio lugar al primer Festival de Música Nueva en Querétaro.
Nueva etapa
Director tomará la batuta de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, luego de entregar el puesto en Querétaro.
