En el primer cuadro del centro histórico de Amealco se encuentra el museo que lleva el nombre de Ricardo Pozas Arciniega, hijo prodigo de aquel lugar, quien tuvo importantes logros en el ámbito de la antropología e historia, además se distinguió por ser un gran difusor y defensor de las tradiciones costumbres y cultura de los indígenas de nuestro país.
El edificio que perteneció a don Jesús González data del siglo XIX el cual pasó a posesión de la Presidencia Municipal en julio de 1987 y fue destinado como Casa de Cultura; en uno de los espacios del edificio es donde se encuentra la hermosa muestra de la muñeca artesanal de la cultura otomí que en la colección nacional “reflejan una forma de expresar las vivencias y sentimientos del propio creador así como tradiciones y colores que embargan su sociedad… en esta colección se muestra un recorrido por todo el país y la variedad de etnias y trajes típicos”.
La colección textil, se explica en los textos del museo, muestra muñecas elaboradas en diversos tipos de tela, en su mayoría en Santiago Mexquititlán y San Ildelfonso Tultepec, dos comunidades de Amealco de Bonfil donde se conserva aún la lengua hñähñu, así como la indumentaria tradicional, como se muestra en esta colección.
De la tradición de las mujeres de Amealco de regalar a sus hijas juguetes con remiendos y pedazos de tela, es como surge la tradición de la muñeca hñähñu, la cual elaboran con base en un molde que le da forma al cuerpo hecho de popelina, cosido a mano y relleno de borra, logrando las ya famosas muñequitas típicas de Amealco que forman parte de las hermosas artesanías queretanas.