Cómo parte de las actividades de Semana Santa, se llevó a cabo la tradicional Procesión del Silencio, que partió del Templo del Calvario y realizó un recorrido por el centro histórico de la ciudad.
La procesión inició en la calle 2 de abril, dónde sanjuanenses y visitantes esperaban el arribo de la columna. Los devotos recorrieron un tramo de la Avenida Juárez y la calle de Hidalgo para llegar finalmente al atrio de la Parroquia de San Juan Bautista, dónde se entonaron cantos y rezos dedicados a la Virgen de los Dolores.
Los grupos religiosos que realizaron la organización del evento, cargaron las imágenes del Viacrucis a lo largo del recorrido, mientras caminaban al sonido de los tambores y del caracol que marcaba el camino de la procesión.
Algunas personas cargaban consigo farolitos y velas, mientras mostraban una postura de silencio y meditación por el dolor de la muerte de Jesucristo, y la esperanza de su resurrección que llegará el domingo.
Está es una de las expresiones más grandes de la fe, en dónde los cristianos meditan en silencio, en una tradición que se celebra desde el siglo XVI y que fue traída desde Sevilla, España por la orden de las Carmelitas.
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