Catrinas, estudiantes aportan sus propias versiones

La mirada de Fernando Reyes y David Josué Hernández

FERNANDO REYES

  · domingo 4 de noviembre de 2018

FOTOS: Fernando Reyes y David Josué Hernández

Una de las tradiciones mexicanas más hermosa y sin duda, la más conocida fuera de las fronteras aztecas, es el Día de Muertos, festividad llena de colorido y alegría, sentimiento que parecería contrario al hecho que se celebra el 1 y 2 de noviembre: la muerte.

La creencia dicta que los muertos regresan a la tierra de los vivos para convivir con sus familiares y seres queridos, quienes les preparan el Altar de Muertos con todo aquello que el fallecido disfrutaba, especialmente la comida, además de que se incluyen fotografías de ellos en vida.

El camino hacia el altar es marcado por la flor de cempasúchil, de amarillo intenso, anaranjado también que es uno de los colores del altar donde también se coloca a manera de ofrendas la caña de azúcar, maíz, papel picado, veladoras, incienso, comida o pertenencias del difunto.

Existe un personaje que es el más representativo de estas fiestas; La Catrina. Creada por el caricaturista José Guadalupe Posada, se trata de un esqueleto con rasgos femeninos que adopta cualquier forma y vestimenta para conducirnos al mundo de los muertos. La podemos apreciar vestida elegantemente o con atuendos indígenas, revolucionarios, folclóricos, vestida de novia, de luto, con rebozos, collares, flores, aretes, sombreros de plumas, pulseras…siempre coqueta, siempre hermosa, siempre sonriente.

Como un tributo a La Catrina, alumnas de la Preparatoria Iteca Plantel Artes, en conjunto con Diario de Querétaro, prepararon una sesión fotográfica donde las jóvenes se caracterizaron como este emblemático personaje que ya es conocido en todo el mundo.

Miriam Sarahi Terrazas Aguirre, Dafne Bonilla León, Guadalupe Yarazet Colín Olvera, Aylin Vargas y Victoria Vázquez Rodríguez, las encargadas de encarnar a La Catrina, aportando sus propias versiones, no sólo para honrar el Día de Muertos sobre otras costumbres extranjeras, sino para demostrar que la juventud queretana esta consciente del importante papel de nuestras tradiciones mexicanas en la formación personal y social.