Algunos datos sobre el vestido de novia nos dicen que se popularizó en 1840, cuando la reina Victoria casó con Alberto de Sajonia-Coburgo; ella eligió un vestido blanco para celebrar su unión matrimonial, y luego de que la fotografía oficial del enlace nupcial se difundió extensamente, varias mujeres próximas a casarse, seleccionaron vestido similar y se hizo tradición hasta nuestros días.
Es un atuendo especial por el que la mayoría de las novias dedican más tiempo para su elección, ya que será la prenda de vestir que usarán en la fecha a partir de la cual iniciarán una nueva etapa de vida, y que después suelen guardar por largo tiempo hasta que, incluso, por tradición lo vuelven a ocupar las hijas o nietas.
Entre esos vestidos que aun resguardan mujeres sanjuanenses como las señoras: Margarita Rojas, Mary Layseca, Magdalena Canobbio, Rosa Aurora Magaña, Cristina Olvera, María Antonieta Martínez, Sol Ostos, Consuelo Alanís, Rosario Robles, Clemencia Palacios, entre varias más, han sido modelados por sus descendientes, amigas o parientas en eventos especiales, sobre todo que tiene por objetivo recaudar fondos para beneficio social.
A través de esos eventos que han sido muy apreciados en nuestra comunidad, hemos podido apreciar los atuendos de novia, su diseño, accesorios y evolución hasta nuestros días.