Nepal volvió a permitir el acceso a su zona montañosa, en concreto al Everest, para las expediciones de fin de año con el objetivo de impulsar el sector turístico pese a la incertidumbre sobre la pandemia, anunciaron el viernes las autoridades nepalíes.
Nepal había cerrado sus fronteras en marzo justo antes del inicio de la temporada turística en que miles de alpinistas se desplazan al Himalaya.
Esta decisión tuvo un coste de millones de dólares para la economía de Nepal y provocó el despido de miles de nepalíes.
El confinamiento nacional se terminó la semana pasada y Nepal se encuentra ahora abierto "para las actividades turísticas y en concreto el alpinismo y las excursiones", declaró a la AFP Mira Acharya, del ministerio de Turismo.
Pero los vuelos internacionales con destino a este país no se reanudarán hasta el 17 de agosto.
"Sería un respiro si podemos volver a organizar expediciones tras una temporada totalmente virgen en primavera", aseguró Mingma Sherpa, del Seven Summit, una de las principales empresas de este sector en Nepal.
La "reapertura" de la zona nepalí del Himalaya se produce en un país en que esta semana se detectaron más de mil casos de coronavirus por un total de 19.547 desde el inicio de la crisis.