La parroquia de Santo Domingo llevó a cabo las celebraciones religiosas que ofició Monseñor Sacramento Arias Montoya, con el fin de que niños y jóvenes, cumplieran con el segundo de los tres sacramentos de iniciación cristiana.
En total, se llevaron a cabo 343 confirmaciones, dirigidas por el párroco Héctor Alvarado, quien realizó la presentación formal de los niños y jóvenes, que se recibirían el sacramento de la confirmación, teniendo como testigos a sus padrinos o madrinas y a sus padres.
“En nombre de la comunidad cristiana, los presentó ante usted padre, delegado de nuestro obispo, como candidatos idóneos para recibir el sacramento de la confirmación. Le agradecemos al obispo, que lo ha nombrado a usted ministro extraordinario para esta celebración sacramental, y en la que participa la comunidad aquí reunida”.
Los presentes escucharon con devoción la ceremonia religiosa, y las palabras que les dirigió el delegado del obispo, para luego cumplir con los diferentes ritos del sacramento de la confirmación, mediante los cuales les fueron conferidos los dones del Espíritu Santo y quedaron fortalecidos en su fe y en su vida cristiana.
“Educar en la fe, es tarea de toda la vida de papás y padrinos, y no termina hasta que morimos. El gran ejemplo depende de su vida cristiana y el buen ejemplo. Somos testigos de Jesucristo, que se nos note que somos cristianos, que soy discípulo de Jesús, que soy católico, que se note”.
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Monseñor Sacramento Arias se encargó de ministrar el sacramento a cada uno de ellos, ungiéndolos con la señal de la cruz al tiempo en que pronunció “Yo te signo con la señal de la Cruz y te confirmo con el Crisma de la salud, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”.
Al cumplir con el segundo sacramento de la iglesia católica, quedaron comprometidos a tener un rol definido dentro de la comunidad cristiana, a defender y confesar su fe mediante palabras y acciones, como verdaderos soldados de Cristo.