Elizabeth Mireya Nieto Jiménez y Jaime Gerardo Yáñez Ordazunieron sus destinos ante el Altar del Santuario Diocesano deNuestra Señora de Guadalupe, mediante significativa ceremoniareligiosa en la que los nuevos esposos contaron con la presencia desus seres queridos, quienes fueron testigos de su juramento de amory fidelidad.
Postrados ante el Altar, Mireya y Jaime escucharon la ceremoniaen su honor durante la que el sacerdote oficiante les dedicóemotivo mensaje recordándoles los preceptos del matrimonio y elcompromiso de amor, respeto, confianza y fidelidad que contraen eluno para con el otro, al cumplir con el séptimo sacramento de laiglesia católica.
En momento emotivo, los contrayentes se dieron el sí definitivoy recibieron la bendición nupcial por medio de la cual quedaronproclamados marido y mujer, teniendo como principales testigos desus promesas matrimoniales, a Luis Jiménez Méndez y LeonorVillagrán Quintanar, al participar como padrinos de manos yvelación.
Los recién casados se vieron acompañados principalmente de losseñores Jesús Nieto y Tere Jiménez, padres de la novia, asícomo de Leticia y Salvador Yáñez, hermanos del novio, de susrespectivas familias, y de los integrantes de su cortejo nupcial,entre ellos: Jesús Nieto y Gloria Ortega, padrinos de lazo,Andrés Nieto y Luz Acosta, padrinos de arras.
Para festejar el feliz y especial acontecimiento en la vida deMireya y de Jaime, una vez concluida la ceremonia nupcial sereunieron con sus invitados en conocido centro social dondedisfrutaron de la recepción en su honor, en la que no se hicieronesperar las felicitaciones y los mejores deseos al iniciar juntosuna nueva etapa de vida, que recibieron por parte sus seresqueridos con quienes se complacieron en celebrar su alianzamatrimonial.