La capital de la moda italiana, Milán, lanza este viernes las nuevas colecciones masculinas para el año en el marco de la semana de la moda "figital", la fusión entre lo físico y lo digital, debido al covid-19.
El neologismo describe el nuevo modelo adoptado por la industria de la moda frente a la pandemia que azota a Italia y el mundo.
El evento, de cuatro días, está salpicado de desfiles reales con modelos, pasarelas y la espectacular escenografía habitual, pero sin público, ya que serán transmitidos en directo por la plataforma de la "Camera della Moda" italiana (la Cámara de la Moda) o los canales de comunicación de las grandes marcas.
Es el caso de Fendi, Etro y Kway, programados para el fin de semana.
Las otras treinta y seis casas optaron por presentaciones grabadas, con cortometrajes y, en algunas casos, por proyectos más artísticos, entre ellas Ermenegildo Zegna, Tod's, Prada y Church's.
Si algunas marcas brillan por su ausencia, como Gucci o Armani, que han optado por seguir el propio programa de presentaciones de sus colecciones, otras firmas, que inicialmente habían aceptado desfilar, decidieron al final retirarse, como Dolce & Gabbana, que suele garantizar en general verdaderos espectáculos de creatividad.
Programados para el sábado, la firma anunció el lunes la cancelación de los desfiles debido a que "no cuenta con las condiciones para su realización" debido a la pandemia.
Los diseñadores italianos, que habían logrado presentar físicamente mediados del 2020 sus colecciones en Milán y Florencia, habían preparado una colección bella para este año, por lo que tenían todo listo.
Sin embargo, la situación de los contagios en Lombardía, de la que Milán es la capital, es preocupante. La región ha sido clasificada color naranja --una por debajo del máximo-- por las autoridades italianas, por lo que las únicas tiendas abiertas son aquellas consideradas esenciales, así como las guarderías y las escuelas primarias.
Además, el toque de queda entra en vigor a partir de las 22H00 hasta las 05H00 y es probable que el sábado la región sea clasificada "roja", el nivel máximo, lo que implica más restricciones.
Moda masculina en caída libre
Las repercusiones de la crisis provocada por la pandemia no tienen precedentes para el sector de la moda masculina.
Según un reciente informe de Cofindustria Moda, la asociación profesional que agrupa a los fabricantes del sector, la moda masculina italiana cerró 2020 con una pérdida del 18,6% de su facturación anual, una disminución de 2.000 millones de euros (2.400 millones dólares).
La pandemia frenó la tendencia positiva de las exportaciones, que disminuyeron en 2020 de un 16,7% hasta los 5.900 millones de euros (7.100 millones de dólares) .
Un viento positivo podría provenir de los mercados asiáticos, que algo se han recuperado, aunque los expertos de la industria pronostican una recuperación sólo en el 2023, no antes.
En medio de ese panorama tan sombrío, la única nota favorable para la economía local es la tendencia de muchas casas a repatriar sus actividades para evitar quedarse sin proveedores.
Una oportunidad para la creación de nuevos empleos en Italia, según la cumbre celebrada en noviembre, Milano Global Fashion Summit, que instó al sector a invertir en la formación de jóvenes y en la tecnología.