Stephanie Aguilar tiene 24 años y actualmente vive en Estados Unidos. Nació en Nueva Jersey, pero a la edad de 4 años, llegó a vivir a San Juan del Río, debido a que su mamá Elvira Aguilar era queretana.
“Desde que estaba chiquita, siempre con mi mamá veíamos Miss Universo. Siempre me ha gustado la plataforma de Lupita Jones y desde chica pensé en participar, pero ya no vivía en México, pues me fui a Estados Unidos cuando tenía 16 años y para participar tienes que tener 18 años”.
En el año 2020, mientras Stephanie estaba en la universidad, y navegando en internet, encontró un anuncio publicitario de Mexicana Universal de Nueva York que le llamó la atención. Decidió investigar más sobre el tema y fue seleccionada para representar a su estado en el concurso Latinoamericana Universal Nueva York, en donde quedó en tercer lugar.
“Estoy muy contenta y agradecida, porque siempre quise ser parte de esto. Es un proceso que te obliga en crecer como mujer, a que te enfoques en ser tu mejor versión. Puedes desenvolverte en cualquier ámbito, por ejemplo, puedes ser doctora y participar en el certamen. Creces como persona y le regresas a tu comunidad algo de lo que te han dado”.
El pasado 6 de agosto participó en la gran final de Mexicana Universal Estado Unidos, en una concentración que se llevó a cabo en Miami, en donde participó contra 13 jóvenes que dieron su mayor esfuerzo para ser coronada. Quedó entre las 5 finalistas y quedó en tercer lugar, lo que la posicionó como una de las máximas representantes de la belleza latina.
“Creo que una de mis mejores cualidades es la comunicación y el hablar con los demás, me preparó en todos los ámbitos, pero trabajo mucho en la seguridad, siempre pienso que tengo que mejorar y seguir practicando. Pienso que existe una posibilidad de que no gane y no me quiero confiar, me digo enfócate y disfrútalo”.
En torno a la percepción que se tiene de los certámenes de belleza, Stephanie expresa que no se pueden englobar a todas las candidatas de todos los certámenes, como iguales.
“Cada candidata tiene un propósito de lo que quiere lograr, por ejemplo, el concurso de Lupita Jones se encarga de empoderar a la mujer mexicana. Hay muchas chicas que ya pasaron por donde estoy yo ahorita, y siguen con sus carreras y este concurso les ha ayudado muchísimo”.
DOS CULTURAS UNIDAS
Stephanie Aguilar tiene 24 años y estudió Administración de empresas en Estados Unidos. Actualmente tiene su propia marca de mezcal denominada “Habla solo”. Le encanta bailar, jugar voleibol y basquetbol, y disfruta mucho estar con su familia y sus amigos.
“Por eso en Estados Unidos valoro mucho eso, porque todos saben que allá hay mucho menos tiempo para la familia y los amigos, se sabe que allá la gente trabaja mucho, por eso hago cosas simples como ver una película con mis roomies, o cocinar un postre”.
Para Stephanie, representar a México en el extranjero es algo poderoso. Le gusta mucho venir al país, porque aquí se da un respiro, puede pensar en las cosas importantes de la vida y retomar fuerzas para seguir adelante. De Estados Unidos, confiesa que ha aprendido que la cultura es muy aguerrida y empoderada, hay una visión muy determinada del “sí puedo” y la gente no se rinde.
“Mi vida es multifacética. Tengo cosas que comparto con la cultura americana y otras de la cultura mexicana, por ejemplo, mi carácter es muy mexicano. Soy más social, cariñosa, empática y emocional, lo que me ha ayudado mucho con mi carrera, pues mucho tiene que ver con contactos y lidiar con personas, entonces el carácter dulce de los mexicanos me ha ayudado mucho. De la cultura americana he aprendido de lo técnico, ellos son más cuadrados y más enfocados. Me ayuda mucho con los aspectos como la puntualidad”.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
Para ella es importante resaltar que los certámenes de belleza, son plataformas que benefician a las mujeres y las ayudan a crecer mucho, por lo que no nos podemos quedarnos con el concepto de que es malo.
“A todas las chicas que quieren dedicarse a esto, les diría que tengan el valor de ir por lo que quieres. A veces te frena el miedo al qué dirán o el miedo a fallar, aunque no logres llegar a ese lugar que visualizas, si vale la pena, porque vas a crecer como persona y te van a llegar más oportunidades. Los sueños que tienes tienen un propósito, el que crezcas y evoluciones como personas, por eso jamás se van a equivocar, aunque no logres lo que quieres exactamente, jamás te vas a equivocar de perseguir tus aspiraciones, siempre va a ser para mejor”.