Montserrat Pacheco Figueroa y Karla Victoria Morales tenían muchas ganas de emprender desde hace mucho tiempo un negocio que las uniera más allá de la amistad.
Durante la pandemia, decidieron emprender por fin esa idea que había estado esperando por miedo al fracaso, y decidieron nombrarla como “Good Hearts Club”, un lugar donde puede encontrar creaciones de bisutería en un ambiente de buena vibra.
“Tenemos productos especialmente para las mujeres, todo lo fabricamos nosotras. Usamos chaquira calibrada, pucas, cadenas de acero inoxidable y de chapa de oro”.
Juntas, las jóvenes de 27 años realizan bisutería como collares, pulseras y cuarzos, y también vasos personalizados como el vaso con el ojo turco, que es de los más vendidos, y que representa la buena vibra o la buena suerte.
“Elegimos el nombre porque siempre hemos estado juntas, somos mejores amigas desde pequeñas y somos como un club chiquito, si traducimos el nombre, es el club de los buenos corazones”.