Jessica Zaldívar Valdés, es una joven estudiante de San Juan del Río de segundo semestre de la licenciatura de Arte Danzario, de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), quien para seguir con su sueño de impulsar el arte en la entidad, ha tenido que hacer una serie de modificaciones en sus prácticas debido al Covid-19.
Relató que desde el año pasado que ingresó a la carrera, toda la realidad cambió, puesto que su propedéutico lo tuvo que hacer de manera virtual derivado de la contingencia sanitaria, y al ser aceptada, sabía que la dinámica tendría que cambiar automáticamente.
En esta licenciatura, ella decidió encaminarse en la línea terminal de ballet, por lo que desde que le dieron la bienvenida a la UAQ, se enfocó a ir colocando estratégicamente los muebles de su habitación, sin embargo, a pesar de esto sufría golpes con algunos objetos y utilizó un perímetro de la sala.
“Apenas me estoy adaptando al lugar donde estoy haciendo mis clases, al principio en mi cuarto me pegaba con los muebles y luego fuimos a sala. Ahorita estoy usando tapetes de foami que es lo que me ha funcionado, hay complicaciones con el internet que también se han ido corrigiendo”.
La bailarina comentó que ahí no pararon los problemas, ya que, el internet es otro obstáculo, puesto que se traba cuando está haciendo algunos movimientos que requieren de concentración, cuestión que se presenta continuamente.
Expresó que es triste que los teatros y lugares públicos estén cerrados por el Covid-19, y que espera que pronto se vuelvan a llena las plazas con eventos que enaltecen el profesionalismo de sus maestros, los cuales añadió son reconocidos de forma internacional.
Zaldívar Valdés mencionó que es indispensable que cuando se tenga un mejor panorama, la cultura y el arte se detonen, al recordar que ella pone su granito de arena a través de la práctica de ballet en niñas, y que, esta disciplina siga tomando peso.