Varias personas se apuntaron para participar en la edición 41 de la serie in situ, esta vez dedicado a conocer las historias de la hacienda que fue la más grande, poderosa e importante en el sur de Querétaro para 1793; los asistentes realizaron recorrido por las bellas instalaciones con explicación por parte del cronista con información desde el origen, arquitectura, estructura social, actividades económicas hasta su decadencia.
Con un repaso a través del tiempo, Neftalí Sáenz hizo referencia a Galindo, su fundación en el año 1582, de sus, alrededor de 25 dueños, “la hacienda Galindo fue levantada desde finales del siglo XVI y principios del XVII, con adecuaciones en los siglos XVIII al XX. Hoy es un hotel cinco estrellas que fue inaugurado así desde 1977”, explicó el cronista.
Habló desde el conquistador español Hernán Cortés, de Malintzin, su concubina, quien fue convertida al cristianismo con el nombre de Marina; de Beatriz de Andrada y Cervantes la fundadora y dueña del mayorazgo de La Llave, quien junto con su esposo Juan Jaramillo, logran amplias mercedes para acrecentar este mayorazgo del que formó parte Galindo.
Como antecedente, también hizo referencia a las herencias y propietarios, hasta llegar al señor don Alonso Pérez de Bocanegra, propietario, en 1584, a quien se le concede aprovechamiento del agua del río Galindo como fuente de energía para el funcionamiento de un molino.
Casi un siglo después, en 1645, tal y como se acredita en el Archivo Histórico de Querétaro, aparece mencionado el capitán Juan Frías Valenzuela como propietario de Galindo, hacienda entonces considerada como tierra de labor y de ganado mayor. De esta época data la construcción de la hermosa capilla.
Y así, fue detallando la historia de la hermosa hacienda de Galindo, hoy un lujoso hotel inaugurado en 1977, donde aún se conservan las trojes adaptadas como salones para eventos, excepto uno de ellos que fue ampliado, cuatro trojes menores y una mayor con gavillero. La casa del escribano que hoy es almacén, la casa del administrador, hoy oficinas, y en excelente estado se conserva la casa del hacendado y lo silos.