En esta edición de recetas te enseñamos a preparar un exquisito postre, flan de guayaba, perfecto para esta temporada de otoño invierno y para compartir con tus seres queridos.
El flan es una de las recetas más populares en la repostería ya que es muy versátil, lo puedes combinar con frutas, chocolate, yogur, café, frutos secos o queso cremoso, siempre es una buena opción para llevar a la mesa.
Hoy te compartimos la receta para cocinar un flan de guayaba con queso.
INGREDIENTES
- 1 taza azúcar blanca refinada, para el caramelo
- 1 lata leche condensada 397 gr
- 1 lata leche evaporada 378 gr
- 8 guayabas en cuadros
- 190 gr queso crema
- 5 huevos
PREPARACIÓN
Precalienta el horno a 180°C.
Prepara el molde del baño maría. Necesitas un molde que puedas meter dentro de otro molde con agua.
Para el caramelo coloca 1 taza de azúcar en una ollita y deja cocinar a fuego bajo hasta que se empiece a derretir. No te desesperes y subas el fuego ya que el caramelo se puede quemar.
Una vez que todo el azúcar se disolvió y está hecho el caramelo, vacíalo con mucho pero mucho cuidado al molde donde vas a hornear el flan. Si usas un molde de aluminio toma un trapo de cocina para mover el caramelo en el molde y cubrir toda la superficie, ya que el molde se calienta mucho y te puedes quemar.
Para el flan coloca las guayabas con todo y semillas en la licuadora (pero sin los extremos de las guayabas) junto con la leche evaporada. Licua muy bien hasta que todo esté incorporado y pasa por un colador, ayudándote de una cuchara para que pase todo el líquido y que las semillas se queden en el colador.
Regresa la mezcla colada a la licuadora y agrega los huevos, queso crema y leche condensada. Licua muy bien y vacía en el molde con el caramelo.
Coloca a baño María y hornea por 50 a 60 minutos o hasta que el centro se vea firme pero todavía se mueva ligeramente.
Retira del horno, del baño María con mucho cuidado y deja enfriar a temperatura ambiente. Una vez que el molde está frío pasa al refrigerador y deja enfriar toda la noche o unas 4 – 6 horas mínimo. Lo mejor es programarte y hacerlo un día antes.
Una vez frío pasa el cuchillo por las orillas. Cubre con un plato, voltea y pega para que el flan salga.