Don David Lamadrid vio por primera vez a su ahora esposa Raquel González en el centro de San Juan del Río: “sus papás no dejaban que nadie se acercara. La primera vez que hablamos fue en la panadería La Flor, de ahí platicamos algunas veces y después nos hicimos novios”.
Cuando Raquel lo vio por primera vez se sorprendió: “que guapo esta, fue lo primero que pensé cuando lo vi. Ojalá que sí me den permiso de tener novio. Nos reunimos en el Casino con mis papás para presentarlo y lo aprobaron”.
Se casaron el 21 de diciembre de 1963 en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe y fue la primera fiesta celebrada en el salón de Don Manuel Prieto, en donde estaba la zapatería La Condesa.
Acaban de cumplir 58 años de casados y han logrado una gran familia con sus 5 hijas: Rocío, Raquel, Rebeca, Concepción y Camelia. También tienen 4 nietos y 4 nietas. Sus hijas son muy unidas y siempre están al pendiente de ellos incondicionalmente.
El secreto para ellos es llevarse bien: “comprenderse uno mutuamente, tiene uno sus errores, pero hay que aceptarlos y aclararlos, y tratar de poner el mejor ejemplo posible a los hijos. “Somos unos niños disfrazados de viejitos” confiesa David.
Y sobre algún consejo a la juventud y su búsqueda con el amor expresa: “yo les diría que hagan una unión, que se apoyen en sus alegrías y en sus dificultades, es para bien de los dos, entre más tiempo pasa más necesita uno de la pareja”.
