Hace referencia a la cuarentena que nos ha tocado vivir, sobre la que cita: sé que no es fácil vivirla en sana convivencia y con preocupaciones, que la vida es un sube y baja, que hay días buenos y otros malos; unos predecibles y otros se tornan distraídos que nos llevan al suelo de manera brusca y tosca.
“Si pudiéramos ver el futuro, otra casa sería…muchas personas pueden ver el futuro trabajando conscientemente en el presente. La distracción nos da siempre un golpe en la nariz y son golpes tremendos que nos dan miedo para la próxima vez que nos equivoquemos. Cuando uno se prepara para vivir con los ojos abiertos, las cosas se dan de una manera fácil, se viven bien, y como te anticipas a lo que pueda ocurrir en tus emociones, pensamientos y con Dios, si suceden imprevistos, tienes la armadura que te libera del sufrimiento. Si las personas actuaran de forma inteligente sabrán que cada segundo se vive en plenitud, en paz y al máximo”.
La palabra inteligencia –explica- significa ver hacia adentro, “y se ve hacia adentro para encontrar las herramientas disponibles, para transformar el entorno. La inteligencia significa la capacidad de resolver los problemas. Una persona inteligente resuelve la problemática existente. Howard Gardner habla de 9 inteligencias: viso-espacial, lingüística, lógica-matemática, kinestésica, musical, intrapersonal, interpersonal, naturista y existencial.
Qué tipo de inteligencia tienes para la cuarentena. ¿Qué tipo de problemas estás resolviendo y desde qué punto de vista los ves? “cada quien debe sacar todo su potencial. No me gustaría que los que me leen estén sufriendo y quejándose todo el tiempo. Hay que hacer algo para resolver los problemas…sé muy bien que cualquier persona que está atormentada de algo, aunque sea insignificante para uno, es un grave problema para esa persona, no la juzgo. Pero sí quiero que tengas la fuerza inteligente para salir adelante…
Para encontrar la serenidad en estos tiempos, se debe ver el problema como una oportunidad y reto, buscar las soluciones posibles y ponerse en acción. Para resolver un problema tenemos que adaptarnos al medio en que vivimos en la actualidad. Si el ejemplo fuera que no tengo qué comer, esas palabras no salieron de la noche a la mañana, salieron de una falta de acción, de ceguera, ya que si una persona no se ha dado cuenta días antes que tiene poco dinero para comer, no diría: no tengo que comer, diría: solo me alcanza para un día de comida, y ese mismo día, con el alimento en el estómago, iría a conseguir la comida de mañana.
Las personas, o son víctimas y espectadoras o son creativas e inteligentes. Una persona víctima espectadora siempre le va a suceder todo y se quedará viendo sin hacer nada, ellas sufren demasiado y no encuentran soluciones a sus problemas… para una persona creativa e inteligente, siempre le van a suceder cosas buenas para tener solución a los problemas.
El creativo e inteligente tiene ilusión y la ilusión siempre vida, el entusiasmo significa todas las posibilidades. En su etimología griega significa Dios dentro de ti o de mí, que nos lleva a traducir en palabras más entendibles, que existen todas las posibilidades para resolver todo lo que se encuentra uno en la vida y con una sonrisa.
Es el momento de generar una actitud de guerreros creativos, inteligentes y entusiastas. Porque la especie que sobrevive ante cualquier adversidad es la que se adapta a los cambios, esto me lleva a pensar que la familia que más se adapte a la cuarentena será la que viva más y sea feliz en la solución a la problemática existente. La familia es donde se forjan los grandes jugadores del equipo. Así que si tú estás de mal humor, enojado o desesperada en tu hogar, es que tu vida ha sido un desastre y tienes que empezar a resolver de adentro hacia afuera, porque tarde o temprano tendrás que pagar un precio alto tu tontería de no darte cuenta.
Hoy no permitas llegar ante este problema solo, busca a tu familia, amigos, socios y resuelve los problemas en conjunto. Es hora de sacar toda tu inteligencia y tu capacidad de crear. Tenemos que llegar al fin del Covid-19 con una certeza que el futuro será de felicidad porque el presente es feliz. Como te dije al principio, sí se puede ver el futuro, solo previniendo en el presente, no en dinero sino en creatividad, inteligencia y entusiasmo. Tu problemática es no hacer, pues ponte a hacer algo que produzca amor, salud y dinero”. ¡Que pases esta cuarentena feliz, alegre y con ilusión!