Concluyó fiesta patronal en el Barrio de la Cruz

por Laura Olguín

  · lunes 7 de mayo de 2018

Alondra Jiménez, reina de las fiestas de San Isidro, con Yuliana y Viviana, sus princesas. Fotos: Laura Olguín

Entre una gama de eventos diversos que ayer se llevaron a cabo en el Barrio de la Cruz, concluyó la tradicional fiesta patronal que dedican cada año a la Santa Cruz, marco en el que fue coronada como reina Alondra Jiménez Bernal y como princesas Yuliana Ugalde y Viviana Epigmenio quienes presenciaron en compañía de la comunidad, los diferentes eventos tradicionales, culturales, artísticos y religiosos que enmarcaron la festividad.

En el programa general destacó la participación de danzas tradicionales como: Danza del Rey Saúl, Danza Techimacit, Danza Chichimeca Guadalupana del mismo barrio, teniendo como invitada a la Danza de Moros y Cristianos del Barrio de San Isidro, y la participación de varios Xitaces que forman parte de la tradición.

La organización estuvo a cargo de los Capilleros en coordinación con la subdelegación del lugar a cargo de Aarón Hernández. El programa del último día de fiesta inició con el Encuentro de la Danza de San Isidro la cual también participó en el cerro del Techimacit, donde momentos antes tuvo lugar la misa en honor a los peregrinos del “Cristo Olvidado” provenientes de Oaxaca, y de los peregrinos del “Divino Niño” de la ciudad de México, además de cabalgata, exposición de carros, eventos culturales y clausura de fiestas.

Los danzantes del Barrio de San Isidro -la Danza del Rey Celso- con la participación de adrian Roman Piña, con la corona de Hernán Cortés, durante su participación representaron la conquista de México, entre los acordes del violín y de la tambora a cargo de Horacio Solano y Antonio González, respectivamente, con una mezcla de sonidos prehispánicos y actuales que marcan el paso de los danzantes.

Por su parte, los danzantes del Barrio de la Cruz, -Del Rey Saúl- encabezados por Rubén Badillo, primer mayor, en su danza representan la conquista ibérica, entre moros y cristianos, bajo los acordes de sonidos del violín a cargo de Alfredo Chávez y de la tambora por Mario Paz; llevaron también a cabo su combate en la explanada del lugar donde acostumbran ensayar, ante la presencia de habitantes del Barrio de la Cruz, quienes así celebraron a la Sana Cruz, su patrona.