La ceremonia inició en el atrio del Templo de Santo Domingo donde su rector, el P. Julián Reséndiz llevó a cabo la bendición de los ramos que los fieles llevaron consigo para, como cada año el Domingo de Ramos, recordamos la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén en medio de una multitud que lo aclamó como el Mesías.
Momentos después el P. Javier Bocanegra Morales párroco de la Parroquia de San Juan Bautista dirigió la ceremonia que antecedió a la procesión, tradición que data del siglo IV en Jerusalén, que recorrió el andador Zaragoza, la calle Cuauhtémoc, Abasolo y llegar al Templo Parroquial.
El recorrido lo realizaron cientos de fieles entonando cantos adecuados, y portando sus palmas y ramos llegaron a la Parroquia donde se dispusieron a escuchar la ceremonia religiosa especial de éste día.
Con este acto la feligresía cristiana recordó el “gesto profético de Jesús siendo aclamado al ingresar como Rey de paz y el Mesías, y después condenado para cumplimiento de las profecías”, y con éste, continuar con los actos de la Semana Santa.