Varios niños y niñas son acercados al bautisterio del Templo Parroquial de San Juan Bautista, cada ocho días durante significativa ceremonia religiosa, para cumplir con el primer sacramento de la iglesia católica.
Una vez que los papás y padrinos cumplen con los requisitos para tal fin, se presentan en la ceremonia comunitaria para hacer cumplir con el sacramento bautismal a sus herederos y así, seguir formando familias católicas.