El pasado 8 de septiembre fue entregado a la Cámara de Diputados, el paquete económico para el 2020 por parte del Gobierno Federal, el cual deberá de ser analizado a profundidad en la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la cual formo parte como Secretaria.
Sin embargo, luego de realizar una primera revisión del documento presentado por el Gobierno Federal, en el Grupo Parlamentario de Acción Nacional tenemos importantes preocupaciones, pero sobre todo, propuestas para ayudar a tener un panorama mucho más competitivo, que ayude a la economía familiar de los ciudadanos.
De entrada: se trata de un presupuesto construido con “otros datos” y en el mejor de los casos presenta claroscuros. Las familias mexicanas continuarán sufriendo los efectos negativos del pobre desempeño económico del país en 2020: pocos empleos y mal pagados.
El Paquete Económico 2020 no genera condiciones de crecimiento económico, no favorece a los mexicanos que demandan mayor inversión y empleo, ni ayuda a que mejore el ingreso familiar y la calidad de vida.
Con pretexto de la austeridad republicana, limitan la reactivación económica mediante el quehacer de las dependencias de gobierno: Medio Ambiente (-7.7%), Turismo (-44.7%), Comunicaciones y Transportes (-21.1%) Economía (-33.3%) y Agricultura y Desarrollo Rural (-31.8%).
La Comisión Federal de Competencia Económica baja 2.3% en términos reales y el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales en -0.5%.
Los recursos para las fuerzas de seguridad no son suficientes para atender los retos que demanda el país. La Guardia Nacional tendrá un presupuesto de 2,242 millones de pesos, pero sus miembros siguen y seguirán cobrando en la Secretaría de la Defensa Nacional o la de Marina. No se identifica la separación funcional entre la Guardia Nacional y las Fuerzas Armadas.
En cuanto a la Política Fiscal, el positivo superávit (0.7%) no viene de una política económica fiscal sólida, sino de recortes indiscriminados al gasto: un auténtico “austericidio”. El gasto ya no dependerá del dinamismo de la economía de Estados Unidos, del petróleo o ni de mayor eficiencia fiscal, sino de los contribuyentes cautivos y nuevos causantes, como: ventas por catálogo, rentas habitacionales, ahorro bancario y financiero, cargas fiscales a plataformas digitales, más impuestos a refrescos y cigarros; más IEPS a gasolinas, bebidas alcohólicas, refrescantes y energizantes.
El Paquete Económico no presenta ningún beneficio a pequeñas y medianas empresas, las cuales representan el 90% del total de negocios en México. Urgimos al gobierno a disminuir el ISR a 25% y el IVA a 10% para atraer la inversión extranjera y se logre reactivar el mercado.
El Paquete Económico del 2020 refleja la desesperación de este gobierno por obtener ingresos para financiar los programas sociales del gobierno, pero endureciendo el trato hacia los contribuyentes. Mientras el Presidente asegura que no aumentarán los impuestos, lo cierto es que se establece IVA en sectores como el comercio digital a través de plataformas de Internet.
Ante la desaparición del Seguro Popular, programas del campo, Jóvenes Emprendedores, Estancias Infantiles, Fortaseg para la Seguridad de los Municipios, la apuesta de este gobierno es dar recursos a clientelas electorales y asistenciales, sin importar la eficacia en el uso. NO claudicaremos nuestra demanda sobre estancias infantiles, además de dar la batalla en favor de las madres trabajadoras, los beneficiarios del Fondo Nacional de Fomento a las Artesanías (FONART), el Programa de Pueblos Mágicos y otros programas que el CONEVAL evalúa relevantes.
Los Diputados de Acción Nacional daremos la pelea por evitar nuevos impuestos y que el gobierno federal lastime la economía familiar.
@sonrocha