El 16 de septiembre de 2016, se cumplieron ciento cincuenta años de la erección de la Columna de la Independencia, monumento surgido en la misma fecha, pero del año 1866, en pleno Segundo Imperio Mexicano con Maximiliano y Carlota a la cabeza del gobierno nacional. Este monumento permanece al centro de la Plaza Independencia, corazón de la ciudad de San Juan del Río, Querétaro.
En el año 2016, ocurrió en la plaza un acto cívico para conmemorar el aniversario doscientos seis del inicio de la Guerra de Independencia de México, era entonces Presidente Municipal el Lic. Guillermo Vega Guerrero. En el marco de este evento solemne, el munícipe realizó la sepultura de una cápsula del tiempo, cercana a la base del asta bandera ubicada en la plancha de la plaza; ahí está una placa que indica su sitio.
La cápsula será abierta en el año 2066, cuando se cumpla el bicentenario de la edificación del monumento a la Independencia, que es la columna. Por encargo del Honorable Ayuntamiento 2015-2018, diez niñas y niños de distintas escuelas de nivel básico de la ciudad fueron seleccionados para fungir como guardianes de la cápsula; en su edad adulta, serán los encargados de abrirla.
La cápsula contiene algunos libros relacionados con la historia, cultura, tradiciones y costumbres de San Juan del Río editados hasta 2016, además de billetes y monedas contemporáneas, diferentes periódicos de la fecha 16 de septiembre del mismo año, así como cuatro cartas escritas por niños y niñas, y una más redactada por el presidente municipal en turno sobre el objetivo de esta acción. También se introdujeron fotografías, videos y textos significativos de la época en que fue depositada.
Las cápsulas del tiempo tienen antecedente desde la antigua Mesopotamia y con ese nombre desde la primera mitad del siglo XX. El concepto de Cápsula del Tiempo tiene por objeto guardar mensajes del presente, o del momento que se trate, como valor para el futuro. En este caso, la cápsula de la Plaza Independencia fue sepultada de forma intencional para que se abra en el año 2066 y las generaciones de ese entonces puedan revalorar a su ciudad, sus monumentos y a la patria en sí.
La Plaza Independencia debe su nombre precisamente a la edificación del monumento localizado a su centro, columna con basamento que originalmente fue planeado para la emperatriz Carlota y que el Ayuntamiento de 1864 decidió llevar a cabo, se lo propuso y ella, en cambio, lo rechazó, sin embargo, pidió fuera mejor dedicado a la independencia nacional, detalle que el gobierno local asumió y fue entonces que lo construyó e inauguró el 16 de septiembre de 1866, así lo expresa la placa primera y más antigua que ostenta la columna en su cara sur.
La columna, en origen, llevaría un busto de la emperatriz en la cúspide que, al dedicarse ahora a la Independencia, se cambió por una escultura de un águila –símbolo de libertad- que se mandó a hacer de bronce y que no duraría mucho, pues fue tirada por un rayo, fue hasta el año 1981 que se colocó la que conserva hasta nuestros días.
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