Hola queridas lectoras y lectores de esta columna Diversidades. Hoy toca rendir homenaje a una mujer que retomó su camino espiritual hace siete años en la Iglesia Incluyente Puentes de Luz – ICM Querétaro y que con el tiempo, sintió el llamado de la Santa Ruah, para ser líder pastoral de la congregación. Me refiero a la pastora Ana Lilia García Pérez, que hoy trascendió este plano terrenal y ya está con la Divinidad.
Ana Lilia llegó a Puentes de Luz por medio de nuestra querida amiga Inés Acevedo, ya que ambas asistían al Centro del Adulto Mayor Nänxu, allí Inés platicaba que como mujer lesbiana que es, asistía a los servicios de fe de la Iglesia Incluyente Puentes de Luz. Un día de 2017, Ana Lilia le pidió a Inés que la llevara y así es como nos conocimos, ya que Puentes de Luz es una de las organizaciones sociales que forman parte del Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación, A.C. Ana Lilia nos comentó que quería conocer la comunidad de fe, ya que tenía un “guapo y maravilloso hijo gay” y que ahora que lo veía feliz y contento formando una familia, quería que su hijo y su nuero pudieran volver a una comunidad de fe y retomar su camino espiritual, que les fue terriblemente arrebatado en su iglesia cristiana de origen, cuando ella decidió poner fin a su matrimonio y como respuesta a esa decisión, fue expulsada junto con sus hijos.
Con el tiempo, Ana Lilia sanó esas heridas que le había provocado su iglesia tradicional y fundamentalista y encontró una nueva familia de la iglesia, con quien compartir su crecimiento espiritual, en un espacio seguro. Ana Lilia con su maravilloso carácter, se ganó pronto el corazón de todas y todos, sobre todo de las juventudes LGBTIQ+, ya que veían en ella muchas veces, a esa madre amorosa que desgraciadamente no todes tenían en su propia casa. Ana Lilia participaba en las marchas del Orgullo LGBTIQ+ portando con orgullo la lona de Puentes de Luz que tiene una imagen de Jesús de Nazareth mirando amorosamente y que dice: Jesús no discriminó. Nosotrx tampoco. Ana Lilia junto con otras mamás, ya en el Jardín Guerrero, sacaba su cartulina que decía en colores arcoíris: “Apapachar es acariciar con el alma”, ven te apapacho. Y con ese simple pero poderoso mensaje, tenía colas de jovencites para ser apapachades por ese amor incondicional que siempre derramaba nuestra querida pastora Ana Lilia.
Hoy miércoles cuatro de septiembre de 2024, nos despertamos con la noticia de que Ana Lilia no había llegado a su casa y su familia había puesto una denuncia en Fiscalía y la estaban buscando por mensajes de WhatsApp. Mi corazón se sobresaltó cuando recibí por parte de Inés ese mensaje, preguntando que yo qué sabía. Luego más tarde, su hijo me confirmó que la Fiscalía les había llamado porque habían encontrado un cuerpo sin vida en los baños del Centro Nänxu y que todo apuntaba a que era su mamá. En ese momento mi corazón y el de muchas personas que conocimos a Ana Lilia se nos rompió en mil pedazos y una saeta lo atravesó cuando nos confirmaron que efectivamente nuestra querida pastora Ana Lilia había muerto de un paro cardiaco fulminante.
Querida Ana Lilia, tu tiempo en este plano terrenal llegó a su fin, pero tu luz jamás será apagada, porque tocaste y apapachaste a tantas personas, que no serás nunca olvidada. Tu luz y amor de madre lo llevaste en todo tu ministerio, llevando el mensaje radicalmente incluyente de Jesús a todas esas chicas, chicos y chiques que te abrazaban muy fuerte en las marchas del orgullo, al despedirse de los servicios de fe y de aquellas personas a las que uniste en matrimonio y niñes que bautizaste para darles la bienvenida al camino de Jesús.
Descansa en felicidad querida Pastora Ana Lilia y ahora que estas con la Divinidad, te pedimos que cada día haya más madres y padres que como tú, que arropen a sus hijas, hijos e hijes de la comunidad LGBTIQ+ y como tú lo hacías, les impulsen a seguir sus sueños y a no claudicar a ellos, aún cuándo todavía tengan que derribar barreras para lograr su inclusión total en todos los sectores de la sociedad queretana.
Se que estarás siempre desde allá arriba, cuidando de tus queridos hijos, hijas e hijas LGBTIQ+ que vivimos en Querétaro. Amén.
*Waltter López, Vocero del Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación y el Estado Laico