Rodiola (Rhodiola rosea), es una planta que crece en regiones frías y elevadas del hemisferio norte, a la que se conoce también como “rosa polar”, “raíz del ártico” o, “raíz de oro”, actualmente su presencia es mundial, gracias a diversos productos elaborados con esta especie.
Esta planta es reconocida por aumentar de forma natural la energía y la fuerza del organismo. Este adaptógeno es beneficioso tanto para deportistas como para personas activas por ejemplo camareros, amas de casa, enfermeras, oficinistas, periodistas, encargados de logística etcétera, ya que ayuda a contrarrestar la fatiga producida por las actividades físicas cotidianas, que a pesar de su baja intensidad desgastan por su continuidad día tras día.
Se ha demostrado que la Rhodiola es capaz de mejorar la comunicación neuronal al aumentar la concentración de neurotransmisores en el cerebro. Su mecanismo de acción frente al estrés consiste en regular los niveles de cortisol, hormona del estrés que aumenta cuando nos vemos en situaciones que presentan algún tipo de tensión laboral, económica, cansancio, etc. la Rhodiola es una planta adaptógena por lo que permite que la mente y cuerpo encuentren un equilibrio que favorezca a el estado de ánimo.
Tomando en cuenta que uno de los mayores problemas que padece la población actual es el elevado nivel de la hormona del estrés, el cortisol. El nivel de vida frenético tiene consecuencias graves en nuestra salud como problemas de tiroides, desequilibrios hormonales, sistema inmune debilitado o pérdida de memoria entre otras.
Dice la leyenda que era la planta que consumían los vikingos en infusión para aumentar su fuerza antes de la batalla. Y, en la actualidad, todavía se conserva la tradición de regalar un ramo de raíces de Rhodiola a los recién casados en Siberia
- Facebook: Heidy Wagner Laclette
